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Las instalaciones del Club de Tenis Valencia funcionaron ayer con casi total normalidad pese al apagón que afectó a todo el territorio nacional. Gracias a la previsión de anteriores equipos de gobierno, la inversión en un potente grupo electrógeno permitió que el Club se convirtiera en un refugio para muchos de nuestros socios durante la jornada.

Mientras la ciudad experimentaba el apagón del suministro eléctrico y telefonía móvil, el Club de Tenis Valencia mantuvo operativos servicios esenciales como el Restaurante. Nuestros socios pudieron acudir a las instalaciones del Club para disfrutar del comedor o el self-service, ducharse con normalidad y, especialmente, cargar sus dispositivos, una necesidad ante la falta de energía generalizada.

Esta situación puso de manifiesto la importancia de la inversión realizada en el pasado, que dotó al Club de una infraestructura capaz de afrontar imprevistos de gran magnitud. La disponibilidad del grupo electrógeno aseguró la continuidad de la actividad en puntos clave del Club, permitiendo que la vida social y deportiva no se viera interrumpida, como sí ocurrió en otros centros deportivos.

La jornada de ayer evidenció el papel del Club de Tenis Valencia no solo como un referente deportivo, sino también como un punto de apoyo para su comunidad en momentos de dificultad. La capacidad de mantener la operatividad de sus instalaciones gracias a su grupo electrógeno subraya la visión y la planificación de anteriores juntas directivas, cuyo legado permitió que el Club actuara como un refugio para sus socios.